México y la crueldad animal por la industria cosmética.

Por: Zaira Gómez.

Imagina que todo tu mundo sea un laboratorio en donde te hacen sufrir untando en tu cuerpo químicos que dañan tu piel, o que seas obligado a respirar sustancias que alteren tu organismo aun estando embarazada. ¡Sería definitivamente una pesadilla!, misma que viven a diario millones de animales en todo el mundo.

De acuerdo a la revista Forbes, la industria cosmética en América Latina factura al año más de 63,200 millones de dólares, pese a las ganancias millonarias no evoluciona en cuanto a la experimentación con animales, afectando su salud y convirtiéndolos en víctimas de la producción cosmética para asegurar la efectividad de dichos productos en los humanos.

Afortunadamente los defensores de animales han denunciado la crueldad de estas prácticas por medio de la difusión de impactantes imágenes de conejos, ratones y monos con los ojos ensangrentados y la piel quemada, las leyes para prohibir o regular su uso aún escasean en la región de América; únicamente Colombia ha marcado una pauta mediante la ley 2047 publicada en agosto de este año 2020, así uniéndose a la lista de 40 naciones (la mayoría europeas) que han dado frente a esta problemática. A pesar de que esta ley entrará en vigencia dentro de cuatro años para lograr hacer modificaciones e investigaciones que no perjudiquen a los consumidores e industria cosmética, ya es un gran avance, mismo que se visualiza en nuestro país.

Es una pena que en México no está prohibida la experimentación en animales ni tampoco regulada. De acuerdo con estimaciones de una organización animal llamada Héroes, unos cinco millones de animales sufren este tipo de maltratos anualmente en el país. Para agregar puntos trágicos, la industria cosmética de México vende 10.000 millones de dólares al año, ocupando el tercer lugar en producción de América, después de la de Estados Unidos y Brasil; así que es demasiada la ganancia como para no comenzar con investigaciones que ayuden a aniquilar este problema.

Hay una esperanza

En marzo pasado se dictaminó una iniciativa para controlar esta crueldad que viven muchos animales en nuestro país; así que está pendiente de ser aprobada en la Cámara de Diputados una ley que regula el uso de animales vivos en la producción, investigación, fabricación y desarrollo de cosméticos. Lo interesante es que propone una pena de dos a siete años de prisión y una multa de unos 7.700 dólares para quienes participen en los polémicos procedimientos; si esto se logra, la industria cosmética tomará muy enserio el dejar de practicar este terrible hecho.

¿Cómo identificar productos libres de maltrato animal?

Por suerte, distinguir si un cosmético es libre de crueldad animal no es cosa de otro mundo. En #LaNuevaVozRadio te recomendamos que tu consumo sea consciente y que nos preocupemos de que no haya alguien lastimado en este proceso. Así que pon mucho ojo en estas peculiaridades para reconocer este tipo de productos:

1. El símbolo de conejo. Algunos cosméticos traen impreso en el empaque unas orejas de conejo, otros un esténcil con la figura completa de un conejo o la figura de una liebre saltando.
2. Si encuentras frases como “cruelty-free” o “Not tested on animals” no dudes en confiar en ese producto.
3. Checa la página de PETA. Me refiero a una organización llamada People for the Ethical Treatment Of Animals que se encarga de acreditar marcas que cumplen con respetar la vida de los animales. Algunas de las marcas que esta asociación destaca son: E.L.F, Urban Decay, Too Faced, NYX, entre otras.

¿Conoces más marcas libres de crueldad animal? Haznos saber de cual se trata a través de los comentarios.