SHOPAHOLIC, LA ADICCIÓN A LAS COMPRAS

Por Jazmín González

Probablemente a la mayoría de las chicas les encanta ir de compras, ya sea para adquirir ropa, calzado, maquillaje, decoración, accesorios o algunos bienes que son considerados de primera necesidad; sin importar si es algo pequeño o grande, la sensación que genera regresar a casa con algo nuevo suele ser muy placentera; aunque en algunas ocasiones, también resulta adictiva.

Al igual que en el amor, mientras se realizan compras el cerebro libera endorfina y dopamina, dos hormonas causantes de la felicidad que te hacen sentirte enamorado de las compras. Sin embargo, aunque parezca algo sano, el shopping puede comenzar a representar un problema cuando se comienzan a comprar productos sin pensarlo dos veces y cada vez con más frecuencia. De acuerdo con la psicología, las compras impulsivas e incluso compulsivas, son el indicativo  de un Trastorno de Compra Compulsiva (TCC).

La peligrosa adicción a las compras

Si bien es cierto el gusto por comprar siempre ha existido, tanto que el 11 de noviembre se eligió como  el ‘Día Mundial del Shopping’; en los últimos años las compras impulsivas y compulsivas se han ido normalizado, más con la llegada de las pedidos Online, en donde las compras se realizan en un abrir y cerrar de ojos con tan solo pasar la tarjeta. 

Y aunque el shopping suele ser asociado con adquirir productos que no son de primera necesidad, cabe resaltar que las compras compulsivas van desde pedir continuamente tu comida favorita hasta tener en tu armario un nuevo accesorio cada fin de semana, lo que a la larga puede representar un problema real en la vida diaria, al grado de convertirse en un trastorno de compra compulsiva que termina por crear angustia emocional y financiera. 

Pero tranquila, según la psicología existe una gran diferencia entre una ‘compra compulsiva’ y la ‘adicción a las compras compulsivas’, pues aunque gran cantidad de las personas han sido víctimas de adquirir algo completamente innecesario, no quiere decir que sean parte del shopaholic.

Compra compulsiva o adicción a las compras compulsivas

La compra compulsiva tiene como principal característica la obtención de objetos que no son necesarios, por lo que en los gastos no se tiene planificado adquirirlo; sin embargo, es casi imposible que una persona no haya pasado por esto antes; pero el problema comienza cuando esta misma acción ocurre cada vez con más frecuencia hasta ocasionar efectos negativos en la persona.

Los especialistas señalan que la personalidad tiene mucho que ver en el shopalcoholic, en la mayoría de los casos, quienes tienen baja autoestima, un autoconcepto negativo o se caracterizan por la impulsividad y la búsqueda de emociones suelen caer en este tipo de adicción; y si a esto se suma la publicidad en redes sociales a través de los influencers o algunas marcas, el problema puede ser mayor.  Comúnmente, las personas que responden a este acto lo hacen como “una forma de llenar un vacío o buscando la validación social”, es decir, dar una apariencia determinada para gustarle a los demás. 

Por ello, es importante identificar en qué momento ir de compras se vuelve un aspecto compulsivo de la personalidad, y sobre todo, admitir cuando el problema se identifica en ti o en alguna persona cerca. Así que para tener muy presente toda la información, aquí te compartimos algunas señales para saber si eres víctima del shopaholic.

Señales de shopaholic

Para poder identificar cuando comprar se vuelve aspecto compulsivo de nuestra personalidad, es importante tener en cuenta las siguientes señales:

• Si se gasta más de lo que se puede pagar, es decir, los gastos son mayores que los ingresos. 
• En tu hogar se encuentran artículos aún con etiqueta porque nunca planeaste comprarlo.
• Cuando se compra mientras se está enojada o deprimida. Ya que una discusión puede detonar ir de compras.
• Las relaciones personales comienzan a dañarse a consecuencia de comprar o gastar demasiado.
• Comprar se vuelve un círculo vicioso porque se adquieren cosas nuevas para cubrir la culpa de la compra anterior.
• Mientras realizas tus compras pierdes el control del comportamiento, pero si no vas de shopping entras en un episodio de ansiedad.

Ahora que ya sabes algunas de estas señales, es importante que prestes mucha atención a los efectos emocionales y físicos que ocasionan las compras, así como también a tu entorno, pues solo así sabrás si son compras compulsivas o se trata de una adicción; más ahora que el ‘Buen fin’, conocido como el fin de semana más barato del año, está por llegar a la republica mexicana con increibles descuentos del 17 al 20 de noviembre.  Mientras tanto, cuéntanos en redes sociales, ¿cuál ha sido tu compra más impulsiva?